La salud financiera de una organización implica gestionar los niveles de liquidez, solvencia o rentabilidad, y llevar un informe detallado de todos los gastos. El renting tecnológico se ha convertido en el mejor aliado para facilitar el control de gastos de las empresas: permite mantenerse a la vanguardia tecnológica y mejorar la productividad, a la vez que optimiza el presupuesto y evita inversiones innecesarias en la adquisición de nuevos activos.

Desde Iberent, tratamos de ayudar a las empresas a llevar un buen control del gasto mediante el renting de tecnología, salvaguardando así la salud financiera

 

La importancia del Control de Gastos en una empresa

El control de gastos (Expense Management en el mundo anglosajón), se define como un conjunto de acciones que permiten a las empresas optimizar al máximo sus recursos, evitando gastos innecesarios y obteniendo los mayores beneficios.

 

El control de gastos es clave para establecer una estrategia financiera exitosa, y supone realizar un seguimiento detallado de los ingresos y egresos, definir los presupuestos y objetivos, o monitorizar las cuentas.

 

Actualmente, todos los negocios, independientemente de su sector y tamaño, deben hacer un análisis exhaustivo de gastos, no solo para gestionar el día a día, sino también para adelantarse a posibles problemas financieros futuros.

 

Algunas de las acciones para mejorar el control de gastos en una empresa son crear acuerdos con nuevos proveedores, mejorar acuerdos con proveedores actuales, eliminar gastos innecesarios y, sobre todo, aplicar un enfoque proactivo gracias a la automatización de procesos y a la obtención de datos en tiempo real.

 

Estos dos últimos aspectos, gracias a las herramientas de gestión como las Intranets o los ERP, son fundamentales para proponer objetivos a largo plazo, tener acceso a información importante, reducir gastos o tomar decisiones efectivas.

 

Nuevos retos en la gestión de tecnología

La gestión de los gastos de tecnología (también llamada TEM o Technology Expense Management) nace de una necesidad de las organizaciones de mejorar el control de sus activos y servicios tecnológicos.

 

El presupuesto de TI de las pymes y empresas ha aumentado mucho en los últimos años e incluye todos sus servicios tecnológicos, desde software y hardware hasta dispositivos, mantenimiento de redes, actualización de sistemas, etc.

 

El control de los gastos que una empresa invierte en tecnología supone dar una mayor visibilidad al inventario de sus activos tecnológicos, así como auditar y gestionar costes o reducir áreas ineficientes, lo que también supone algunos desafíos.

 

Uno de los más importantes es configurar los recursos tecnológicos según sus dependencias de software, versiones o seguridad en el acceso y almacenamiento de datos.

 

Esta tarea puede consumir mucho tiempo, e incluso desembocar en problemas como servidores inaccesibles, incompatibilidad de componentes con determinados sistemas operativos, programas anticuados sin soporte técnico, etc.

 

El otro gran reto de la gestión de los gastos tecnológicos de una organización es la obsolescencia, que afecta directamente al presupuesto de la empresa (cuando un activo tecnológico llega al final de su vida útil, hay que sustituirlo por otro, con la inversión económica que eso supone), pero también a su productividad y seguridad.

 

De hecho, pasar por alto el ciclo de vida de los activos tecnológicos
puede dejar a las empresas sin la capacidad de crecer, con la consecuente pérdida de competitividad y rentabilidad: mientras continúan desarrollando sus procesos con poca capacidad operativa, estas empresas se enfrentan a la falta de liquidez y a mayores dificultades para sostener su modelo de negocio.
 

 

Optimización del presupuesto a través del renting de tecnología

La compra y renovación de tecnología supone un porcentaje de inversión cada vez más importante para las empresas.

 

En este contexto, el renting tecnológico se perfila como una solución eficiente y sostenible en el tiempo.

 

El renting tecnológico es un servicio que consiste, básicamente, en el alquiler de equipos informáticos, ordenadores, maquinaria, software y nuevas tecnologías.

 

Se trata de una alternativa ideal para muchos autónomos y pymes que necesitan dispositivos o programas concretos y que no cuentan con los medios necesarios para poder adquirirlos, o para cualquier organización que desee llevar un control de gastos exhaustivo sin descapitalizarse.

 

Ventajas del renting frente a la compra tradicional

Además de la posibilidad de predecir y planificar gastos con mayor precisión, las empresas obtienen otras ventajas del renting tecnológico en comparación con la compra tradicional.

 

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Estos son los beneficios del renting más importantes:

 

● Supone un ahorro de dinero.

● Sus gastos son fiscalmente deducibles.

●La capacidad de endeudamiento de la
empresa se mantiene intacta.

● No es necesario realizar una gran inversión inicial, lo que reduce los riesgos financieros de la actualización de equipos y sistemas. 

● Fomenta la economía circular.

 

Otras ventajas del renting de tecnología:

1. Acceso a la tecnología actualizada y eficiente: 

El renting de tecnología potencia la innovación y garantiza el acceso a equipos y sistemas de última generación. Esto supone un incremento de la productividad y la competitividad de la organización, ya que cuenta con herramientas actualizadas y a pleno rendimiento que no necesitan tiempo de soporte técnico o asistencia continua.

 

2. Flexibilidad y escalabilidad

Una de las grandes ventajas del renting tecnológico es su capacidad para adaptarse a las necesidades cambiantes de las empresas gracias a su flexibilidad.

 

Por ejemplo, en Iberent ofrecemos el renting evolutivo, adaptándose así a las necesidades y evolución de cada negocio.

Facilitando poder ampliar o reducir el parque tecnológico según las demandas de los clientes.

 

De hecho, si estás pensando en expandir tu empresa, el renting de tecnología con Iberent te permite probar con un contrato pequeño e ir ampliándolo según aumenten tus necesidades.  

 

3. Renting Circular: contribución a la sostenibilidad

El renting tecnológico, como concepto, forma parte de la economía circular, definida según la ONU, como «un sistema en el que todos los materiales y los componentes se mantienen en su valor más alto y los residuos no existen».

 

El renting circular reduce la producción de residuos tecnológicos. De hecho, en Iberent facilitamos la gestión de los equipos obsoletos, reciclándolos o introduciéndolos en el mercado de segunda mano. Supone una reducción de los residuos generados y una gestión más eficiente de los mismos, atendiendo tanto a criterios medioambientales como legislativos.

 

4. Planificación a largo plazo

El renting tecnológico es un gasto fijo que evita grandes desembolsos asociados al cambio de equipos y sistemas cuando están desactualizados y obsoletos.

 

Gracias a esta fórmula, las empresas pueden organizar sus gastos y realizar una planificación financiera más ajustada a largo plazo.

 

Esto es especialmente interesante para los emprendedores o para proyectos empresariales en vías de desarrollo, crecimiento o expansión, quienes podrán organizar sus gastos con mucha más previsión y evaluar costes y beneficios en periodos de tiempo prolongados. 

Iberent como partner tecnológico

El renting tecnológico facilita el control de gastos en la empresa y ofrece ventajas fiscales, económicas y tecnológicas para pymes y autónomos, adaptándose a las necesidades financieras de todo tipo de negocios.

Iberent lleva más de 18 años siendo referente en el sector del renting tecnológico.

 

Nuestra experiencia y solvencia nos permite adaptar nuestras soluciones a tus necesidades específicas, ofreciéndote financiación a tu ritmo, con cuotas crecientes, decrecientes o lineales.

También garantizamos la mejor cobertura en seguros tecnológicos y línea directa con un equipo gestor para que resuelva todas tus dudas.

 

Llámanos y te daremos las mejores opciones de renting para tu negocio.

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